Los padres de un grupo de usuarios de la unidad de estancia diurna del centro San Juan de Dios han vuelto a insistir, como ya lo hicieron con un escrito en el año 2016, en la necesidad de que sus hijos cuenten con un monitor en los desplazamientos diarios de Dos Hermanas al centro.
Así lo explica Adela Machuca Jiménez, una de las madres de los seis usuarios de Dos Hermanas afectados, que se desplazan cada día con otra persona de Alcalá de Guadaíra en una furgoneta dispuesta por el centro.
Antes, comenta, estas personas formaban parte de la ruta de Sevilla, pero, según explica esta madre, “tardaban hora y media en llegar al centro”, por lo que se dispuso de este transporte alternativo en febrero de 2017.
En este caso, el trayecto es de unos 40 minutos, “al ser personas con una gran discapacidad, necesitan de alguien que esté pendiente de ellos y así atender posibles problemas, como crisis epilépticas, que se desabrochen el cinturón o puedan agredirse”.
Aunque se trate de un conductor-monitor, consideran que éste “debe centrarse en la seguridad en la carretera y no en estar atentos a los usuarios”, añade Adela.
Posibles mejoras
Fuentes consultadas en el centro San Juan de Dios aseguran que siempre están abiertos a posibles mejoras en el servicio, sin confirmar si se va a tener en cuenta o no esta petición planteada por las familias.
