PENSAR HACIENDO, es decir, dar forma tangible a nuestros pensamientos para ponerlos en manos de los potenciales clientes, es una de las formas más efectivas de ahorrar tiempo y dinero en el desarrollo de nuestra solución, ya sea un producto, servicio o mix de ambas cosas. Igual que una imagen vale más que mil palabras, un prototipo vale más que mil teorías sobre lo que podría funcionar. Algunas técnicas de prototipado rápido que podemos usar son:
Conversaciones: Al principio la palabra es la forma más rápida y barata de recabar la opinión de terceros. De hecho, ¿quién no ha empezado por contar su idea a amigos y familiares para ver qué opinan?
Storyboard: Igual que los guionistas de cine o TV, dibujamos la escena en la que nuestros potenciales clientes se benefician de nuestro producto o servicio para solucionar su problema. Esto nos ayudará a tener en cuenta detalles que a menudo pasamos por alto.
Bodystorming: Consiste en generar y pulir ideas mientras recreamos la situación de forma casera. Si queremos prototipar, por ejemplo, nuevas formas de pagar al acceder al transporte público podemos recrear un autobús con las sillas de nuestra oficina y otros elementos que simulan este entorno.
Impresión 3D: Aunque se trata de una técnica cada vez más popular, sigue siendo muy ventajosa para tener acceso a versiones iniciales de lo que después será nuestro producto físico, de forma que podamos valorar y mejorar su diseño, funcionalidad, etc.
Maquetas: Cuando el escenario a prototipar es amplio o queremos recrear interacciones entre personas podemos usar maquetas hechas de cualquier material y añadir a la escena ‘legos o playmobil’ para conseguir un mayor provecho de la sesión de prototipado en grupos.
Mockups: Este término define las versiones de menor funcionalidad que simulan a una aplicación de escritorio o a una app móvil. Se trata de definir el contenido de las pantallas, la navegación, etc. sin llegar a desarrollar la misma, para recoger la opinión de los usuarios y las mejoras observadas tras poner en sus manos esta versión provisional de bajo coste.
Existen muchas técnicas de prototipado más, pero en cualquier caso todas deben ayudarnos a responder la pregunta: ¿Cómo puedo poner a prueba mi solución y verificar que es atractiva y adecuada para mis potenciales clientes en el menor tiempo posible y con el menor coste?
PROYECTO DE LA SEMANA
Una casa para todos los amantes de la música
A casi todos nos gusta la música. La industria musical mueve millones de euros cada día en España. Sin embargo, para aquellas personas que cada día pasan de escuchar a tocar, cantar o componer… la vida no es fácil. Para empezar, la enseñanza musical reglada es rígida y limitada. Si no tienes 8 años o no te interesan los instrumentos clásicos estás en desventaja. Incluso a esa edad, cientos de niños y niñas quedan fuera cada nuevo curso tras las pruebas de acceso. A partir de ahí, el comportamiento de los aficionados a la música actualmente roza sin querer la clandestinidad: clases particulares en casas particulares, locales de ensayo escondidos en polígonos industriales, redes informales para buscar a través de terceros músicos para la banda, etc.
Es el esquema de lo improvisado, de lo atomizado y de lo desorganizado. Nada que ver con el fomento de la cultura y la enseñanza de la música en otros países, por desgracia. Pedro Pablo Figueroa es pianista y profesor, pero ante todo es un amante de la música que no se conforma con este panorama. Para ello está trabajando actualmente, y su objetivo es abrir en Dos Hermanas una escuela de música en torno a un lugar donde tengan cabida músicos de todas las edades, niveles, instrumentos e inquietudes. Cuando Pablo cuenta su proyecto transmite la visión de un punto de encuentro donde cualquiera puede entrar sin limitaciones si quiere aprender, mejorar o compartir su afición en grupo. Una casa con aulas para grupos pequeños de cualquier instrumento y nivel (al margen de la edad), con un auditorio para agrupaciones y orquestas, locales de ensayo, estudios de grabación y edición, etc. Un lugar de referencia para la comunidad de músicos de Dos Hermanas. Una comunidad que aprende música pero también valores, que ofrece conciertos y actuaciones benéficas, que disfruta organizando viajes o experiencias en grupo en torno a la música para jóvenes o adultos… que forja amistades para siempre. ¡Ojalá pronto podamos ver este proyecto hecho realidad!
