Juan Carlos Polo Zambruno lleva desde los 18 años escribiendo poesía, pero como afición, sin aspiraciones, a pesar de haber sido el autor local premiado en la primera edición del certamen literario del programa municipal de prevención de adicciones Dos Hermanas Divertida. Lo suyo, así lo reconoce, “es escribir por inercia, porque al leer también te seduce la escritura”.
A sus 23 años, se presentó a este certamen por la idea de hacerlo con dos amigos, Narciso Raffo y María Roldán, ya que le hacía ilusión que se publicase sus obras con las de ellos. Para ello, este estudiante del último año de Filosofía, presentó dos poemas: Mirándome y Como una brutal bestia, que fue la obra ganadora.
Si tuviera que definir el estilo de “sus intentos de poemas”, Juan Carlos habla de intimistas, “enclaustrados en el yo” y con una “rima abrupta”, por lo que le sorprendió que ganara, ya que “no son poemas alegres o románticos”.
Entre sus principales influencias poéticas se encuentra Miguel de Unamuno, “al que le tengo especial cariño, a pesar de que decían de él que era un pésimo poeta”, Juan Ramón Jiménez, Gustavo Adolfo Bécquer, Federico García Lorca o Rosalía de Castro.
Juan Carlos recopila hasta el momento unas 30 creaciones poéticas aunque no se plantea la publicación, sin descartar, eso sí, el presentarse a otros concursos literarios. Su futuro, asegura, quiere enfocarlo por la docencia y la gestión cultural. Actualmente, compagina sus estudios con su trabajo en una editorial y asesorando a profesorado de universidad, colaborando con un grupo de investigación y una revista filosófica.
{xtypo_rounded4}Jóvenes inquietos
En Dos Hermanas, Juan Carlos forma parte del comité de jóvenes asesores de Dos Hermanas Divertida, que le ha permitido conocer “un grupo de mucha actividad cultural”. Por ello quiere agradecer al programa el que “haya dado participación activa a jóvenes interesados en la cultura y que hemos encontrado en el mismo un buen foro en el que manifestarnos”.{/xtypo_rounded4}