El Dos Hermanas CF pasa actualmente, al igual que otros muchos clubes, por una situación de crisis, debido principalmente a la actual situación económica, así como por el abandono de muchas empresas locales, que no apuestan un poco por el club más representativo de la ciudad. La entidad, presidida por Juan Varela, contaba hace tres temporadas con un presupuesto de unos 100.000 euros. Esta campaña, esa cantidad se ha reducido hasta los 20.000. Equipos de su misma categoría sí cuentan con presupuestos mayores, caso del CD Alcalá, Mairena o Los Palacios, sobre todo, gracias a la aportación de sus respectivos ayuntamientos.
Aunque los directivos del conjunto rojiazul se afanan en conseguir dinero por doquier, no lo consiguen. No obstante, cuentan con el apoyo del consistorio nazareno y del Patronato Municipal de Deportes, que les ofrece los estadios Miguel Román y Manuel Utrilla, así como los adelantos de la subvención que se le otorga todos los años. Asimismo, cabe destacar que el Dos Hermanas tiene aún pendiente el ingreso de una suculenta cantidad de dinero que le adeuda el Fenerhbace turco, en concepto de derechos de formación del futbolista Dani Güiza, jugador que recaló en el conjunto local.
La merma en el número de abonados se ha notado de manera notoria en las arcas del club. El club tampoco cuenta con el apoyo de muchos de sus antiguos jugadores, que podrían colaborar con el equipo sacando su carnet de socios.
Al menos, una de las principales alegrías la representan la cantera del club, con Antonio Ramos a la cabeza, que le ha dado un gran impulso, debido a la incorporación de nuevos entrenadores, consecución de títulos, así como la ayuda de padres.
El Dos Hermanas CF ha sufrido esta campaña grandes cambios en el plano de lo meramente deportivo. El primer punto, fue la llegada del técnico lebrijano Paco Cala, conocedor de la cantera, dado que en anteriores temporadas consiguió varios títulos y ascensos con el Atlético Antoniano, así como con sus filiales. Cala asumió las riendas del club de Tercera División con muchos canteranos y algunos veteranos de la temporada anterior. En la actualidad, el equipo está en puestos de descenso automático. Sabemos que la liga es larga y que hay tiempo para reaccionar. De este modo, se explica la gran confianza que deposita la entidad sobre este entrenador y su equipo técnico. Sólo falta paciencia, puesto que Paco Cala y los suyos son muy capaces de sacar al equipo de su actual atolladero.
Sirvan estas líneas para hacer público llamamiento a todas las empresas, públicas y privadas, para que aporten su granito de arena al Dos Hermanas CF, para que así consiga saldar sus deudas con sus jugadores, a quienes la directiva destina en su totalidad el poco dinero que obtiene.
Que estas líneas sean también un llamamiento a los aficionados nazarenos, para que saquen de nuevo sus abonos, o sus entradas, y vuelvan al Miguel Román, a acompañar a su equipo local. Con su colaboración, sería posible hacer la taquilla suficiente para pagar al trío arbitral.
Los buenos resultados pronto llegarán y, por fin, el Dos Hermanas CF conseguirá remontar y conservar la categoría. De no alcanzarse esto último, se luchará para que en próximas temporadas se pueda contar con un equipo totalmente de canteranos. Ánimo, para directivos, técnicos y jugadores, para que lleven a la nave rojiazul a buen puerto.
El Dos Hermanas visita esta jornada al Marinaleda.
