1996. Las críticas de un cuarteto al tamaño del nuevo teatro escuecen en el Ayuntamiento

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carnavalDisfrazados de las esculturas de las aceituneras, provocan las risas actuando en medio de la calle, fuera del circuito oficial

El carnaval de 1996 se encuentra en todo su esplendor. Está llamando especialmente la atención un cuarteto “ilegal”, fuera de las subvenciones y del circuito de actuaciones de la Concejalía de Fiestas. Formado por un floristero, un contratista de obras, un periodista y un policía local, el singular cuarteto responde al título de “Dos Hermanas, su cuñao y el que vino contratao (Primer cuarteto monumental Ciudad de Dos Hermanas)”, ironizando sobre el gran número de eventos que últimamente son bautizados con la repetitiva coletilla de “Ciudad de Dos Hermanas”. Su tipo, muy trabajado, se puede observar en la foto inferior. Refleja las tres figuras del monumento a las aceituneras y un cuarto personaje: el mejicano que las esculpió (“el que vino contratao”).

Sus actuaciones, improvisadas en las esquinas de las calles del centro, están arrancando las carcajadas de los nazarenos, que han llegado a dejar taponada la calle Real. Desde el Ayuntamiento miran con escasa simpatía a este cuarteto, sobre todo por sus agudas letras. Uno de los cuplés, que alude a la intención de tirar el edificio consistorial, termina así: “Dice mi abuelita,/muy lista y sabihonda,/que esa idea le gusta,/tan solo pide una cosa:/que hagan una plaza toros/ en ese solar en el centro/pa podé aprovechá/ to el ganao que anda suelto”.

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Ha escocido especialmente un pasodoble dedicado a las “estrechuras” del nuevo teatro municipal (la letra se reproduce más abajo), uno de los proyectos estrella de la actual legislatura socialista.

carnavalLa polémica letra

Tiene mi pueblo un teatrito
más chiquito no lo hay,
ha costao su dinerito
para que todos vayáis.

Mire usté si este teatrito
tiene un arte tan puntero
que hasta el mismo Torrebruno
quiso venir el primero.

Pa sacá una entrada
echas toa la tarde
y siempre se acaban.
Los peasos de cola
llenan por completo la calle Real.

“¡Aquí no se cabe!”
“¡Esto está mu estrecho!”,
dice toa la gente cuando está sentá.
“¡Las butaquitas!”,
“¡Ay, mis rodillas,
las tengo en la espalda de la vecina!”

¡Ay, teatrito de mi pueblo,
chiquito y bonito, qué bien acabao…
quién habrá sido el gracioso
hijo de…. artista que te ha diseñao!

¡Ay, teatrito nazareno,
tú no hagas caso de ninguna Mari,
qué de chistes te han sacao,
y alguna te ha bautizao
como el Teatro de… la Barbi!

 

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