Un año después de la mudanza el fotógrafo sigue contando con el apoyo de su clientela
Se cumple el primer aniversario del cambio de ubicación del estudio Vilches Fotógrafo, que dejó atrás la avenida de España, donde llevaba asentado cuatro años, para instalarse en la calle García Ramos, 11, tras la parroquia de La Oliva. Han sido 365 días en los que José Miguel, su gerente, quiere agradecer el apoyo que ha seguido recibiendo por parte de sus clientes a pesar de la mudanza.
El cambio ha favorecido sobre todo al trabajo de este profesional de la fotografía que ha visto como se ha duplicado su espacio de trabajo, sobre todo en lo que a estudio se refiere, con 120 metros cuadrados para ir alternando los escenarios de sus fotografías, ya sea para la campaña de Navidad o para las comuniones, “permitiendo un margen mayor a mi capacidad de innovación”. Además, la tienda cuenta con una sala de exposición, de unos 70 metros cuadrados, en la que Vilches cuida hasta el último detalle, con una exposición que se renueva tres o cuatro veces al año, ya que, confiesa, “me gusta mostrar mi trabajo al público”.
Si algo caracteriza el trabajo de Vilches como fotógrafo es la originalidad y frescura de sus creaciones en todos los campos en los que se mueve; así como su versatilidad, ya que lo mismo hace fotos de bodas, comuniones o de estudio, así como fotografías de industrias, calendarios, platos de cocina o eventos sociales. Pero si por algo es reconocido es por sus trabajos de fotografía infantil. Todas ellas se caracterizan por un llamativo colorido en contraste con la utilización casi siempre de un fondo blanco para sus instantáneas.
Este toque de 'informalidad' en sus trabajos se contrapone con su profesionalidad, avalada por más de 20 años de experiencia, así como la de los equipos que utiliza para las fotografías.
Los clientes que buscan a Vilches para sus fotografías conceden al profesional toda su confianza para que desarrolle su trabajo con total libertad. Este detalle es correspondido por el fotógrafo una vez terminado su trabajo. Digitalmente presenta un grupo de las mejores 15 ó 30 instantáneas, aunque finalmente se siga optando más por el álbum tradicional frente al digital. Vilches devuelve esa libertad al cliente para que elija las fotos que más le gusten, aceptando, “aunque no se ha dado el caso”, apunta, “que no eligiesen ninguna, por lo que no les obligaría a quedarse con ellas”.
En una época tan audiovisual y “en la que todo el mundo tiene una cámara ”, Vilches aconseja que a la hora de encargar un trabajo fotográfico se mire “más la calidad que el precio”, ya que es algo que va a quedar para siempre y es importante que lo realice un profesional.
A pesar del predominio de lo amateur, Vilches no se queja del grado de conocimiento y la proyección que su trabajo tiene tanto en Dos Hermanas centro como en el núcleo de Montequinto, contando con una sólida clientela y nuevas adquisiciones que van llegando a él movidos por el boca a boca. A pesar de ello, Vilches prepara la puesta en marcha de una página web, todavía en fase de construcción.
Continuo reciclaje
José Miguel Vilches lleva en el mundo de la fotografía desde hace más de 20 años. Formado en Imagen y Sonido decide embarcarse en el mercado comercial en marzo de 2003, cuando abre su primera tienda en la avenida de España. Poseedor de varios premios de fotografía, es miembro de la Asociación de Fotógrafos de Sevilla y de la Federación Española de Fotografía. Tras la llegada de la era digital, Vilches sigue en continua formación, para adaptarse a las nuevas técnicas fotográficas.
VILCHES FOTÓGRAFO
C/ García Ramos, 11.
Telf. 95 533 28 51
