El altar de cultos presenta un curiosa forma que no se veía desde el año de la Coronación
La Virgen de Valme estrena este año para sus cultos una peana que ha elaborado el escultor imaginero nazareno Salvador Madroñal. Durante los actos previos a la romería, que comenzaron el pasado viernes con el traslado de la Virgen al altar mayo, seis cabezas de ángeles talladas en madera de cedro real velarán por Valme y por su Hijo.
El escultor imaginero, Salvador Madroñal, que también fue pregonero de Valme en 2005, llevaba dos años trabajando en esta peana, que ha regalado a la hermandad y que sentía como “una deuda pendiente” desde aquel pregón en el que los ángeles también cobraron gran imortancia, además de ser un detalle con el hermano mayor, José Ramón Gómez Tinoco, que este año termina su mandato.
En este caso, los seis ángeles simbolizan aquellos que los primeros cristianos imaginaban siempre junto a Cristo. “Además, en los primitivos batisterios, en el siglo I, se han encontrado seis cuadros negros, que simbolizan a esos seis ángeles”. En este caso, van policromados al óleo y estofados en oro fino, además de tener cada uno una expresión diferente. “Uno incluso va llorando, el que va debajo del Niño Jesús, ya que está como presagiando lo que le iba a pasar al Hijo de Dios”, comenta Salvador.
En cuanto a la peana, la sensación es que los ángeles son los que transportan a la Virgen, como en una nube. “Se trata de un trabajo muy original. Estoy seguro de que Valme va a ser la única que va a tener una peana de estas características”, dice Madroñal.
Quinario y Besamano
Como novedad este año, cabe destacar la estética del altar de cultos. En esta ocasión, se ha restaurado una antigua corona que es la que remata el dosel que enmarca el altar. A diferencia de otros años, este dosel se ha colocado simulando un manto que cae desde la corona y está recogido por los laterales, formando un pabellón. La curiosidad es que la corona y este tipo de dosel no se ponía desde el año de la Coronación de la Virgen, lo que refuerza el sentido de la tradición de Valme.
Así, este altar de cultos tan singular es el centro de las ofrendas y misas, entre ellos el solemne Quinario que se celebrará hasta el próximo viernes, día 17, a las 20:45 horas. Ayer martes, día 14, jornada en la que se cumple el 75 aniversario de la Hermandad del Rocío, esta participó corporativamente en el Quinario.
Asimismo, a las 9:00 horas del sábado, día 18, comienza al devoto Besamano de la Virgen, que continúa toda la mañana, hasta las 14:00 horas, y en horario de tarde, de 17:00 a 22:00. Ese día, además, será la ofrenda floral de los carreteros de Valme, así como de la juventud cofrade de Dos Hermanas.
Homenaje a los ancianos
También está previsto para el viernes, a las 16:30 horas, un encuentro con los centros de mayores y las unidades de día de Dos Hermanas, aunque se hace extensivo a todos los mayores nazarenos. En este acto sencillo, presidido por Juan Núñez, se pretende darles cabida para que pasen una tarde entrañable cerca de Valme.
En este acto, en el que se cuida al detalle la organización, también estarán presentes los jóvenes de las hermandades, para fomentar la convivencia de los mayores con los que representan el futuro.
