Final espléndido para una gran liga

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ROCIERALa Rociera empató ayer en el campo del Marchena, y venció el jueves al San Antonio

El equipo nazareno cerró ayer su participación por este año en la Regional Preferente. En el campo del Marchena, la Rociera hizo honores a lo anunciado hace algunas jornadas por su presidente: aunque la permanencia ya estaba asegurada, el equipo siempre saldría con la mente puesta en la victoria final.

Y prueba de ello es el descenso del Marchena. Dependía   su triunfo ante los nazarenos para mantenerse en la competición, pero los de López Hidalgo se emplearon a fondo durante los 90 minutos de partido y demostraron su deportividad, sin estar primados, para no perjudicar a un tercero.

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El encuentro tuvo las fuerzas muy igualadas en ambas partes. El Marchena lo intentó más en la primera mitad con más nervios que orden, pero no fue hasta el minuto 49 cuando acertó a hacer el 1-0, momento en el que Ernesto chutó de lejos y en un extraño del balón en el bote se introdujo en la portería de Alex. Pocos minutos después, el árbitro pitaba un penalti en contra de la Rociera, pero Carlos estuvo acertado y desvió el esférico.

En los minutos finales del partido, el Marchena intentó defender el resultado, perdiendo mucho tiempo para parar el ritmo del partido. Con todo, la Rociera siguió presionando arriba, y ya en el descuento Chico aprovechaba una buena jugada de conjunto para entrar libre de marca por la izquierda y batir sin dificultad al portero.

Con el 1-1, no quedaba mucho para más. Los locales descendían de categoría. Los nazarenos, felices, cierran una temporada llena de orgullo y buen hacer.

El jueves, despedida de la afición por todo lo alto:
Victoria por 5-0 ante el San antonio

La Rociera jugó el pasado día 1 su último partido como local en la presente liga. El rival, muy mermado, se presentó en el Manuel Adame con solamente diez jugadores. El equipo que dirige López Hidalgo que el único protagonista del partido. En una auténtica fiesta para su afición, los nazarenos lograron cinco goles, pero pudieron ser muchos más. El partido terminó diez minutos antes de lo previsto, puesto que el árbitro suspendió el partido ante la inferioridad númérica del San Antonio, que adujo lesiones de los jugadores que estaban sobre el campo -no pasaban de seis-. Con la permanencia asegurada, los locales cumplieron con creces. 

 

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