Inquietos, inquirientes, imprudente

0
- Publicidad -

(Mateo 2, 1-12) ¿Quiénes entre nosotros sois los más inquietos de la casa, los que no consentís en quedaros quietos, los que sentís la necesidad imperiosa de experimentar por vosotros mismos, de hacernos saber que queréis vivir vuestra propia vida?

¿Quiénes entre nosotros sois los que más os interrogáis, los que más acudís a la ciencia para saber, los que más cuestionáis toda tradición, también la religiosa?

¿Quiénes entre nosotros sois los que cuando creéis que ha aparecido una estrella no dudáis en ir donde sea pensando encontrar un retazo de la vida que muchas veces no sentís plena?
¿Quiénes entre nosotros sois los más imprudentes y confiados que no teméis acercaros a los “Herodes” de hoy –siempre ha habido cultura de muerte–, creyendo encontrar en ellos una vida que queréis llenar?

- Publicidad -

Los magos de oriente fueron jóvenes inquietos, preocupados por saber y confiados hasta la imprudencia; pero gracias a ellos se conoció que Dios mismo había querido hacerse niño para salvar a la humanidad.

Os necesitamos jóvenes, a vosotros que sois inquietos, que creéis que podéis saberlo todo, que no teméis experimentar con la vida. Os necesitamos tanto en la comunidad cristiana, como vosotros necesitáis de la luz verdadera que es Jesús de Nazaret.

- Publicidad -

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí
Captcha verification failed!
La puntuación de usuario de captcha falló. ¡por favor contáctenos!