También en el fútbol femenino existen lamentables agresiones a los árbitros. El hecho ha ocurrido con María del Rocío Cubero Ruiz, entrenadora del Azahar, de Primera Andaluza. Al parecer, insultó y agredió al colegiado que dirigía el encuentro de su equipo, con el agravante de que también quebrantaba la sanción que le impuso el comité de competición en el pasado mes de octubre. Con estos hechos, no es extraño que cada vez haya menos árbitros en el fútbol aficionado.